lunes, 26 de abril de 2010
Programación e Interactividad
miércoles, 21 de abril de 2010
miércoles, 14 de abril de 2010
Un Ruido Secreto (II)
En la segunda parte del texto se expone la idea de como el arte se ha ido convirtiendo en una fuente de comunicación masiva y como fuente de comunicación de un gran grupo de personas ha ido perdiendo paulatinamente su exclusividad y la idea de pertenecer a un grupo privilegiado o elite. De esta forma se crea la idea de que el arte a perdido su idea fundamental y su valor al masificarse, pero la verdad es que según mi opinión el arte simplemente logró abrirse a nuevos públicos, y eso no necesariamente quiere decir que esté perdiendo su valor, solamente estamos en presencia de la democratización del arte y apreciando como incrementa su valor popular e influencia en la cultura de un grupo social.
También expone la idea de cómo el Artista (según mi parecer) es un niño aún, ególatra, sediento de atención y de comunicación. Si nos ponemos a observar detenidamente eso es un artista, un ser sediento de comunicación, expresa su mundo interno, sus ideales, sus sueños y vivencias en una obra, pretendiendo que el espectador capte el mensaje de lo que fue plasmado en ella, o simplemente mostrándose él mismo y destacándose como un ser importante dentro de un grupo y poder ser observado por los demás. Pero al ser tan ególatra pasa a llevar puntos muy importantes dentro del arte, y uno de esos puntos es, el espectador. El espectador necesita saber en que contexto fue creada dicha obra para comprender cada una de sus aristas, es por esto que el arte-ególatra de un artista en cierto sentido pierde valor para la nutrición del arte como fuente cultural en si pero en otro sentido alimenta la expectación o las posibles interpretaciones de dicha obra y que hace más interesante, la apreciación de ésta.